La marca buscaba comunicar al consumidor final los beneficios de su amplia línea de marcadores frente a la fuerte competencia del sector. Se generaron diferentes campañas publicitarias que fueron comunicadas tanto en punto de venta como en medios gráficos y en vía pública móvil como el subte de Buenos Aires y varias líneas de colectivos que conectan CABA con GBA. También se trabajó en el rediseño del packaging no solo mejorando la estética de los mismos sino adaptándolos a las necesidades de los clientes (librerías) que necesitaban un pack que unifique comunicación, acopio en góndolas y fácil acceso para el despacho en mostrador.